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El Centro Educativo Rural El Colchón –CEREC- organizó un acto en el paraje “Paso Sosa”, jurisdicción de Villa Río Bermejito, en memoria de la “Masacre de Napalpi” (1924- Presidencia de Alvear).
En aquella oportunidad más de un centenar de indígenas del Pueblo Qom fueron brutalmente asesinados a manos de la policía y ejercito de aquel entonces. A más de 80 años de aquella horrorosa tragedia, el caso sigue sin condenados ni responsables.
En el mismo acto estuvieron presentes alumnos del establecimiento el CEREC, quienes recibieron libros de lectura y las libretas de calificaciones del primer trimestre del año. Acompañaron el dicho encuentro los presidentes de las Asociaciones Comunitarias del Paraje el “Colchón, La Sirena, Diez de Mayo, Fortín Lavalle, Paso Sosa, Vecinos de Villa Río Bermejito, La Mesa de Gestión del CIC de Bermejito, entre otras. También, se hizo presente, desde el Ministerio de Educación, la titular de la Subsecretaria de Interculturalidad y Plurilingüismo de la provincia Prof. Elizabeth Guadalupe Mendoza.
Mario Fernández, Director del CEREC y autor del libro de “Napa` lpì la voz de la Sangre” manifestó que Napalpi “fue una masacre, de las más crueles que se han conocido en la historia Argentina, porque además de asesinarlos, mutilaron sus cuerpos, les cortaron a los hombres sus miembros, cabezas, las orejas y las colgaron como trofeo. Como Qom no podemos olvidar, porque aquella sangre derramada por nuestros hermanos, abuelos, antepasados, sigue clamando justicia”.
Por su parte, la Subsecretaria Mendoza expreso en consonancia con Fernández que “fue un genocidio, un crimen que todavía sigue impune. Por ello es necesario no perder la memoria, porque un pueblo sin memoria es un pueblo sin pasado, y sin pasado es imposible construir un nuevo presente. Agrego, que “por todo y a pesar de todo, les pido a los jóvenes que sigan estudiando, por encima de las dificultades, que sigan adelante, luchando con esperanza, fuerza y siempre pacíficamente”.
En acto sencillo y emotivo, la comunidad reunida reflexionó sobre lo sucedido en Napalpi y la situación actual por la que atraviesan el pueblo Qom.
Jorge Collet representante de la JUM (Juntada Unida de Misiones) realizo su aporte, al mencionar “que se han violado sistemáticamente los Derechos Humanos a los Pueblos Originarios, por lo que estoy asombrado de la paciencia y la fuerza de la gente para seguir luchando por justicia”.
Casi finalizando el encuentro y luego de una reunión con la dirigencia de la localidad, el Centro de Estudiantes del CEREC hizo saber a la Subsecretaria Mendoza y comunidad presente, que luego del receso invernal, los estudiantes saldrán a tomar clases en las calles, debido a que el establecimiento educativo no cuenta con la infraestructura mínima, lo que significa que se viola el derecho a la educaron bilingüe e intercultural, según lo establece la Constitución Nacional y Provincial. La propuesta fue apoyada por los padres y presidentes de las Asociaciones Comunitarias presente, y de no recibir respuesta alguna por parte del Ministro Romero, procederían al corte de ruta acompañados de alumnos y docentes. En esta reunión, la subsecretaria Mendoza se comprometió a transmitirle en forma directa el planteo al gobernador Capitanich sobre el malestar de los estudiantes, docentes y comunidades.
El acto culmino con la entrega a las Asociaciones Comunitarias presentes de la copia de la Demanda Judicial al Estado Nacional por la masacre de Napalpi impulsada por el abogado Carlos Díaz y un almuerzo fraterno. Dicha demanda fue interpuesta ante el juzgado Federal de Resistencia hace ya 7 años.
Fuente: Chaco día por día
El Gran Chaco Americano ocupa una superficie de un millón de kilómetros cuadrados sobre Argentina, Bolivia y Paraguay y en él sobreviven 200 mil integrantes de 15 pueblos originarios. Hoy, representantes de comunidades indígenas de ese territorio se reunirán con el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, para reclamar por el desmonte y el “genocidio étnico”. El encuentro se realiza en el marco del encuentro trinacional de la Semana de los Pueblos Indígenas, en la que los dirigentes de esas comunidades debaten sobre un problema en común: el incumplimiento de las legislaciones nacionales e internacionales que reconocen los derechos a la tierra de las comunidades contra el avance de la frontera agrícola sojera, las empresas forestales y de hidrocarburos sobre las recursos naturales que mantienen su modo de vida ancestral. El encuentro se realiza hasta el jueves en Buenos Aires con el lema “somos vida, somos tierra, queremos justicia”. Antes de la reunión en la Corte Suprema, Página/12 se reunió con referentes indígenas del Gran Chaco para repasar reclamos y reivindicaciones.
“No podemos vivir peleando unos con otros. Pero hasta ahora los derechos indígenas fueron vulnerados. Por eso, aquí estamos las autoridades originarias de los pueblos de las tres naciones para solicitar a los gobernantes y los magistrados que cumplan con la ley para que podamos recuperar nuestros territorios, nuestra autoestima, nuestra identidad cultural, orgullosos de la herencia de los antepasados y no ya avergonzados como antes”, indicó el referente guaraní Quintin Valerosa Cuellar, de Yacuiba, Bolivia.
El cacique wichí Dino Salas, que llegó desde la localidad salteña de San Ignacio de Loyola para encabezar mañana la reunión con Ricardo Lorenzetti. En el encuentro, los dirigentes llevarán su preocupación por “la excesiva lentitud en los procesos judiciales y administrativos” en temas como el “genocidio étnico” que sufre el pueblo toba en El Impenetrable chaqueño y los desmontes ilegales en la provincia de Salta, problemáticas por las que la Corte Suprema ya se expidió en 2007 y 2009, respectivamente. “A pesar de la declaración de la Corte Suprema de parar el desmonte en cuatro departamentos, venimos a solicitar que se resguarden a las familias que, aún hoy, están amenazadas por desalojo en sus tierras ancestrales”, apuntó Salas.
La demora en el incumplimiento de una orden de la Corte Suprema desató entre los referentes del Gran Chaco el reclamo por la aplicación de las legislaciones nacionales e internacionales que aseguran los derechos preexistentes de los pueblos originarios (ver aparte). Por eso, el coordinador del programa trinacional, Alipio Valdez, indicó que “no hay por parte de los gobiernos un reconocimiento que se traduzca en la titularización de los territorios y las tierras de los pueblos siguen estando sujetas a la expansión de las empresas agropecuarias, forestales y petroleras”. Además, Valdez subrayó que “en el Chaco (Americano) el problema es más grave porque sigue siendo una región marginal para los tres estados”.
Por la riqueza natural que ubica al Gran Chaco como quinta prioridad entre los hábitats más significativos en recursos genéticos y diversidad biológica, según un estudio del Banco Mundial, las actividades extractivas de los recursos naturales se extienden en los tres países. “En ninguno de los tres países los gobiernos consultan a los comunidades antes de que las empresas entren a desmontar para plantar soja, realizar pozos petroleros o comprar tierras para el ganado. Como dicen los políticos, ‘la torta tiene que ser repartida’. El pueblo indígena busca su economía y los gobiernos tienen que facilitárselo”, sentenció Sixto Codutti, representante del pueblo toba de Pampa del Indio, Chaco. “No estamos en contra del desarrollo, no estamos en contra de ningún beneficio que pueda alcanzar a toda la humanidad, pero sí estamos en contra de que no se respete a la Madre Tierra”, aclaró Cuellar, para los escépticos.
Fuente: Pag.12
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